La base de la columna estratigráfica está constituida por una alternancia de lutita, toba andesítica y arenisca que conforman a la Formación Alberca (KbehLu-TA), expuesta reducidamente en la esquina sureste de la carta. Su edad es Berriasiano- Hauteriviano y está en contacto concordante y transicional con la Formación Tecalitlán (KhapBvA- A), la cual está constituida por brecha andesítica, flujos andesíticos, y algunos niveles de riolita; expuesta al sureste de la carta. Su edad es Hauteriviano-Aptiano y está cubierta concordantemente por la Formación Tepalcatepec (Kapce TA-Lm), la cual presenta sus mejores afloramientos en las porciones sur-oeste y nor-oeste, con exposiciones restringidas en la parte central de la carta. Está conformada por toba andesítica con intercalación de estratos de limolita, y menormente de caliza (KaceCz) de estratificación mediana a gruesa hacia la parte superior, la cual fue posible separar. La edad de la Formación Tepalcatepec es Aptiano-Cenomaniano. Cambia lateralmente de facies de un ambiente volcánico a uno predominantemente sedimentario representado por la Formación Madrid, que en la región de Colima se divide en tres miembros, el inferior y más extenso aflora en las porciones central-sur y nor-oeste y está constituido por estratos delgados y medianos de caliza arcillosa, lutita, y limolita (KaCz-Lu); la parte media la conforman capas masivas de yeso con interdigitaciones de caliza, limolita, lutita y arenisca (KaY); y en la parte superior, de caliza en estratos gruesos (KaCz). Los tres miembros tienen un alcance del Albiano, y su depósito está relacionado con sedimentación en cuencas someras o plataformas restringidas de ambiente intra-arco; aunque algunas calizas comparten dos ambientes, el ya mencionado -intra-arco- y el de cuenca tras-arco. Los miembros calcáreos superior e inferior- de la Formación Madrid están cubiertos en aparente concordancia por la secuencia clástica de la Formación Cerro de La Vieja, que algunos autores consideran como la parte superior de la Formación Madrid, pero que en este trabajó se diferenció porque aflora irregularmente en una franja que tiene dirección NW-SE y cruza por el centro de la carta de sur a norte. Está representada por una alternancia de limolita, grauvaca y conglomerado polimíctico en el que ocurren mayormente fragmentos andesíticos, y en menor proporción, caliza y cuarzo, en general de color rojizo, con rizaduras, laminación y estratificación cruzada. Hacia la base del Cenomaniano existe posiblemente un hiatus, pero al parecer reinicia el depósito con sedimentos terrígenos constituidos por horizontes delgados de arenisca y conglomerado con intercalaciones de horizontes tobáceos (Ks(?)Cgp-Ar), los cuales están expuestos en las porciones poniente y suroeste. No hay registro de dataciones en esta unidad, pero sus relaciones estratigráficas permiten asignarle edad del Cretácico Superior. Esta secuencia vulcano-clástica descansa discordantemente sobre la Formación Tepalcatepec, y se le considera como la parte basal del amplio afloramiento de brechas andesíticas y dacitas (Ks(?)BvA-Da) expuestas en el límite poniente de la carta, e intrusionadas por rocas cristalinas graníticas y granodioríticas (KsTpaGr-Gd). Tampoco existen dataciones para la unidad de andesita-dacita, por lo que su edad tentativa se infiere en base a las relaciones estratigráficas que guarda con las unidades Tepalcatepec y el conglomerado del Cretácico, y por ello se le asigna edad Cretácico Superior. Se interpreta que las rocas cristalinas representan la continuidad al sur del batolito Vallarta, con afloramientos en la esquina nor- oeste. Justo al sur de dichas exposiciones es evidente el levantamiento de las rocas cretácicas, generado por esta masa cristalina. Existen otros afloramientos de menores dimensiones en las porciones central, oriente y sureste de la carta. La edad del intrusivo es Cretácico Superior-Paleoceno. Algunas de las unidades antes mencionadas se encuentran cubiertas discordantemente por lahares cuaternarios (QptLh) de la Formación Colima, provenientes del volcán de igual nombre. Estos depósitos caóticos están compuestos por una mezcla de andesita-basalto y basalto vesicular en bloques de 1 a 2 m de diámetro, los fragmentos están adheridos por una matriz piroclástica y se intercalan con horizontes de ceniza; sólo los cubren depósitos continentales del Holoceno. Tienen amplias exposiciones en la esquina noreste de la carta y su edad se considera del Pleistoceno. Rellenan algunos valles depósitos recientes conformados por conglomerados mal consolidados, arenas, limos y arcillas (QhoCgp) que pueden conformar los suelos agrícolas. Los depósitos aluviales (Qhoal) corresponden a terrazas y materiales acarreados en los cauces de las corrientes.
Se definieron dos tipos de deformación, dúctil-frágil y frágil; la primera es evidente en las rocas sedimentarias de la Formación Madrid, cuyos datos estructurales permiten interpretar pliegues asimétricos con rumbo NNW-SSE, como es el caso de los anticlinales Alcomún, Cerro de la Vieja y La Guelica. Existen otros, a escala de afloramiento, de tipo chevron La deformación frágil se asocia a tres sistemas: el primero tiene orientación NW-SE, y está representado por cuatro zonas de cizalla principales que son: Cruz de Piedra, El Chino, El Alcomún y Loma Alta: El evento posiblemente está relacionado con la subducción oblicua de la placa Farallón bajo la Norteamericana, que tuvo lugar durante el Cretácico tardío-Paleoceno temprano; el segundo tiene orientación NE-SW, y posiblemente forma parte de la zona de transpresión izquierda que delimita al bloque Jalisco y la Sierra Madre Occidental, en donde ocurren las zonas de cizalla La Ortiga-Cerro De La Vieja, La Sidra, Jala y Alondrita, activo durante el Mioceno medio. El tercero, probablemente contemporáneo con el anterior, tiene orientación sensiblemente N-S, y se relaciona con la zona distensiva que separa a los bloques Jalisco y Michoacán, y que durante su evolución dio origen al graben de Colima. Como pertenecientes a este sistema se identificaron las fallas Río Armería y el conjunto de fallas Las Trancas.
A nivel regional, la tectónica está relacionada con la convergencia de las placas Norteamericana y Farallón, que adoptan una posición burdamente paralela a la margen pacífica, lo que originó un arco volcánico de islas conocido como el arco Zihuatanejo, cuya evolución alcanza su máxima intensidad entre el Jurásico tardío y el Cretácico Inferior, aunque persiste hasta el Cretácico tardío;. Durante este periodo se depositó una potente secuencia volcanosedimentaria, la cual se distribuye a lo largo de la porción central y septentrional del estado de Guerrero hasta el occidente de México, en Jalisco y Sinaloa. Esta convergencia, es la responsable de la posterior evolución de los elementos tectónicos, entre los que destaca el Terreno Guerrero.
En el marco de la tectónica reciente, la región se ubica en el graben de Colima, el cual delimita a el bloque Jalisco al nor-oeste, y el bloque de Michoacán al sur-este; probablemente la distribución de los bloques es el resultado de la divergencia entre la placa del Pacífico Oriental y las placas de Rivera y Cocos subducidas bajo la de Norteamérica.
En la carta se delimitaron tres áreas mineralizadas: Ixtlahuacán, Cerro Náhuatl y Rincón de López. Los yacimientos metálicos más importantes son de fierro, ubicados en las áreas Ixtlahuacán y Rincón de López, en donde se emplazaron a partir de un proceso combinado de inyección magmática y reemplazo metasomático. La mineralización está constituida por magnetita con hematita y pirita coligadas, mientras que las alteraciones se reducen a propilitización incipiente, y granatización con intensa oxidación supergénica asociada. Los depósitos minerales regularmente se encuentran emplazados en el contacto del intrusivo con la secuencia vulcanosedimentaria de la Formación Tepalcatepec y con la Formación Madrid. También existen yacimientos epitermales de relleno de fisura con malaquita, siderita, cerusita y smithsonita, con algunos valores de Pb, Zn, Cu, y Ag, emplazados en las formaciones Tepalcatepec y Cerro de La Vieja. Los yacimientos no metálicos incluyen yeso, y caliza que se utiliza para producir cal hidratada.
Área mineralizada Ixtlahuacán. Se localiza en el sector oriente de la carta, en donde los depósitos de fierro ocurren en la mina Alondrita, y en los prospectos Piscila, Loma Alta, y El Venado, y en la manifestación La Higuera. En la mina Alondrita se explotan cuerpos irregulares y aislados de fierro cuya principal dirección es al N 63° E, con inclinación de 35° al SE. La mineralogía es magnetita, hematita y limonita que se presenta en el contacto entre el intrusivo granítico-granodiorítico y la Formación Tepalcatepec. La obra minera es un tajo de 300 m de longitud, 200 m de ancho y 100 m de altura. Los resultados de 3 muestras a lo largo de 5 m fueron de 64.61% de Fe total (t). Tanto en la mina La Alondrita como en otras localidades se analizó Au y Ag, para descartar la posibilidad de que el yacimiento tuviera afinidad con uno de tipo IOCG (iron oxide copper gold), pero los resultados indican que no hay ocurrencia de oro. En los prospectos Piscila, Loma Alta, El Venado y La Higuera, las formas son estratiformes e irregulares, con mineralización de magnetita, hematita, limonita y calcita que se presenta en el contacto del intrusivo y la Formación Tepalcatepec. En Piscila se observa un crestón masivo de forma irregular que aflora a lo largo de 150 m, con espesores de 4 a 8 m, y un desnivel de 100 m, la traza del crestón tiene rumbo N 16° E con echado de 87° al NW. Existe un rebaje de 8 por 4 y 3 m de altura. Se colectaron dos muestras de 4 m de espesor con resultados de 13.41 y 16.41% de Fe (t). Loma Alta consiste de dos cuerpos estratiformes de fierro los cuales tienen rumbo e inclinación de N 14° W con 18° al NE; se extiende por 100 m de longitud con espesores de 1 a 2 m y desnivel de 20 m. Se colectaron dos muestras de 1 m de ancho que reportaron valores de 29.91 y 38.91% de Fe (t). En El Venado se observaron tres niveles de toba andesítica con contenidos de mineral de fierro, pseudo-estratiforme, orientados e inclinados al N 60° E con 89° al SE, a lo largo de 100 m con espesores de 2 a 5 m y un desnivel de 30 m. En el nivel inferior se colectó una muestra de 2 m de espesor con valores de 7.24% Fe (t), en tanto que en el superior dos muestras de 2.5 y 2.0 m de espesor dieron valores de 6.08 y 7.26% de Fe (t). La Higuera corresponde a una toba y epiclastos andesíticos con impregnación de mineral de fierro. El rumbo de los pseudo-estratos es N 78° E con inclinación de 10° al SE, y dimensiones de 100 m de longitud, 10 m de espesor y 15 m de ancho. La roca se encuentra afectada por diques que también contienen Fe. Se tomaron cuatro muestras de canal, con espesores de 1.6 a 3.0 m en donde los valores varían de 6.13 a 10.31% de Fe (t).
La Mina Tamala, de polimetálicos emplazados en caliza de la Formación Madrid corresponde a una brecha calcárea con espesor de 3 m orientada al N 02° W, e inclinación de 42° al NE. La mineralogía es siderita, cerusita, smithsonita, limonita y calcita. Se colaron tres socavones, el de mayor desarrollo, de 40 m, en el cual existe un rebaje de 12 por 10 y 10 m de alto que comunica con otros socavones aterrados. En el rebaje se colectaron cuatro muestras con espesor promedio de 1.5 m, y con valores de 7.03% de Zn, 1.78% de Pb, 19.3% de Fe y 0.28% de Cu. La Gallina, es una mina abandonada en donde se desarrolló una frente de 78 m a rumbo de estructura. A los 21 m corta a un crucero, y a los 28.5 m, un pozo de 3.5 m de profundidad. La estructura es una es una brecha de actitud tabular con rumbo al N 83° E, e inclinación de 72° al NW. Aflora a lo largo de 270 m con espesor de 5 m. La mineralización es de carbonatos de cobre y fierro, y se presenta impregnada en los planos de fracturamiento y rellenando los huecos entre los fragmentos de la caliza. Se colectaron 2 muestras de interior con espesor promedio de 1.4 m, los resultados son 23 g/t de Ag, y 1.63% de Cu, y dos de terrero en donde los valores son de 32 g/t de Ag y 3.7% de Cu. El cuerpo de la manifestación El Guayabillo tiene forma irregular y aflora por 10 m con un espesor de 0.5 m. Está alojado en la Formación Cerro de La Vieja; la mineralización es de carbonatos de cobre, la cual se observa como impregnaciones en la roca y planos de fractura. En algunas áreas en donde se apreció la mayor concentración (0.50 por 0.50 m), se tomó una muestra de 0.40 m de espesor con 5.26 % de Cu y 15 g/t de Ag. La manifestación El Capire es una estructura irregular que aflora por 10 m con espesor de 0.5 m. La mineralización de carbonatos de fierro, plomo, zinc, y cobre se aloja en caliza de la Formación Madrid. Dos muestras de 0.50 m de espesor arrojaron valores de 30.46% de Fe 1.08% de Zn, 0.048 % de Pb, 0.264 % de Cu. Agua Cercada, es una manifestación de vetillas de cuarzo tipo stockwork, en una zona de alteración -silicificación y arglitización- de aproximadamente 250 m de longitud, y 100 m de ancho, alojada en toba andesítica de la Formación Tepalcatepec. En la misma se tomaron seis muestras de 3.72 m de espesor promedio y diferentes sitios de la misma, los valores obtenidos en plata son del orden de 1 g/t y en oro el más alto es de 0.025 g/t, no se obtuvieron valores en fierro. El Papelillo corresponde a una zona de silicificación de 300 m de largo, por 100 m de ancho, paralela a una falla de rumbo N 23° E y echado de 84° al NW. Existen en ella una red de vetillas de cuarzo formando un stockwork, en donde se observa limonita y pirita diseminada alojada en la toba andesítica de la Formación Tepalcatepec. Los resultados de una muestra son de bajo interés económico.
Área mineralizada Cerro Náhuatl. Se ubica en el cuadrante nor-oeste de la carta, en donde se localiza la mina de fierro Cerro Náhuatl, que corresponde a un yacimiento de metasomatismo de contacto con forma irregular. Consta de dos cuerpos, el principal de 2,600 m de largo, y de 30 a 45 m de espesor; el segundo con 400 m de longitud y espesor de 80 m, ambos orientados al N 60° W e inclinación de 55° al SW. La mineralogía es magnetita, hematita y limonita, emplazada en el contacto del intrusivo y la caliza de la Formación Madrid. Se explota a cielo abierto por la Compañía Minera Las Encinas (HYLSA). En su etapa inicial el CRM reservas de 14'309,735 toneladas, con ley de 34.5 % de Fe. Manifestación Cerro Pelón, corresponde a un dique andesítico que aflora por 300 m de longitud y unos 60 m de ancho con 40 m de desnivel estimado. La mineralogía es magnetita y limonita. Se colectó una muestra de 10 m de longitud que reportó 4.58% de Fe. Como polimetálico se tiene la manifestación El Cajón que corresponde a un dique andesítico de 75 m de longitud y 2.5 m de espesor. Su rumbo es N 06°E, e inclinación de 57° al SE. La mineralogía observada es hematita, limonita, pirita diseminada y cuarzo. Los resultados de dos muestras con espesor de 1.23 m, son: 0.04% de Zn, 0. 02% de Cu, 0.01% de Pb y 6 g/t de Ag.
Área mineralizada Rincón de López. Se ubica en el cuadrante suroeste de la carta, en donde se ubicó la manifestación de mineral Escaltitán 1, la cual corresponde a una zona de fracturamiento y brechamiento de 15 m de longitud, y 3 m de espesor. La mineralización es de carbonatos de cobre y óxidos de fierro. Se tomaron dos muestras al ancho del cuerpo (3 m), las que en promedio reportaron 3.63% de Cu y 21 g/t de Ag. Una muestra de 10 m de ancho tomada sobre un dique dio 4.7% de Fe.
Los yacimientos no metálicos se encuentran distribuidos en casi toda la carta. Se identificaron de yeso para la elaboración de tabla roca en la Formación Madrid, como la mina La Media Luna y los prospectos La Salada, La Trinidad, La Constancia, Cerro Atravesado y La Alcantarilla. De carbonato de calcio, como Cerro Galindo donde se aprovecha la caliza de la Formación Madrid para producir cal hidratada, y los prospectos de caliza Los Asmoles, y Cerro El Alcomún. Además, se tienen varios bancos activos e inactivos en la alternancia de lutita- limolita-arenisca, toba andesítica y lahar, en donde se produce intermitentemente grava y arena.